La epidemia de ébola en Sierra Leona aumenta su velocidad de propagación. Los ciudadanos empiezana indignarse por la falta de asistencia. En Aberdeen, en Freetown los vecinos esperaron cuatro días para que fuera recogido el cuerpo de un joven de 17 años muerto por ébola. Esta situación es general.
La falta de medios sanitarios es habitual en Sierra Leona pero ahora cobra relieve por la gravedad de la epidemia.
Un responsable policial, Elijah Moses Ashi, explica sus intentos para acelerar la recogida del cadáver: “Dijeron que ya llegaban, eso ya nos lo dijeron el martes. Llamé ayer, llamé el miércoles, llamé hoy otra vez más y esta mañana volví a insistir porque me dijeron que los vecinos querían manifestarse y bloquear la carretera”.
La ONG británica Save the Children estima que en Sierra Leona se contagian cinco personas por hora. La velocidad de propagación puede multiplicarse por dos en noviembre.
La Organización Mundial de la Salud ha capacitado a 400 trabajadores sanitarios en una semana. El Reino Unido ha construido un centro con 700 camas a una hora de Freetown para hacer frente a un previsible empeoramiento de la epidemia de ébola.
