Por el momento no se ha alcanzado el nivel de alerta máxima, que supondría riesgo de atentado, pero la seguridad ha aumentado en las calles francesas tras las amenazas lanzadas por los yihadistas.
Este jueves el presidente francés, François Hollande, convocó un Consejo de Defensa en el Elíseo en el que ha asegurado que Francia mantendrá su operativo en Irak. Lo que aún está en el aire es si ampliará su acción militar a Siria.
El Consejo también abordó el asesinato del montañero secuestrado el domingo en Argelia.
“Francia no cederá jamás, no se deja intimidar, se lo debemos a
nuestro compatriota que ha sido asesinado” dijo el primer ministro, Manuel Valls.
En París, en el barrio inmigrante de Belleville, la comunidad musulmana teme pagar las consecuencias de las amenazas yihadistas.
“Vamos a ser nosotros los que paguemos por esto. Es su culpa y lo pagaremos nosotros”, dice un ciudadano.
Miles de musulmanes han convocado marchas en varias ciudades europeas como gesto de repulsa contra los crímenes y actos violentos del grupo Estado Islámico.