A pesar de varios tratamientos, la pata de Knallen no consigue recuperarse. Pero ahora, gracias a un nuevo remedio a base de 13 bacterias del ácido láctico del estómago de las abejas, todo podría ir mejor.
Las bacterias deben ser tratadas con miel, agua y azúcar. Esta mezcla producirá sustancias antimicrobianas que acabarán con los gérmenes resistentes a los antibióticos.
El descubrimiento ha sido realizado por un grupo de investigadores de la Universidad sueca de Lund.
La miel fresca ha sido utilizada durante siglos para curar infecciones, pero las 13 bacterias estudiadas producen, juntas, una mezcla activa contra los microbios. Cuando el ácido láctico fue aplicado en el laboratorio sobre los gérmenes éstos fueron contrarrestados.
“El ingrediente principal de este remedio es la propia bacteria viva. Podemos retomar el viejo remedio para convertirlo en uno nuevo mezclando la miel con estas bacterias lo que supone un alto nivel de concentración”, explica Alejandra Vasquez, una de las investigadoras.
Este descubrimiento podría ayudar a la comunidad médica a resolver el problema de la resistencia global a los antibióticos. El próximo paso de los investigadores será probar el remedio en los humanos.
“La curación se produce entre una y tres semanas pero tiene lugar aunque sean heridas crónicas. Nosotros creemos que este descubrimiento podría ser una alternativa a los antibióticos. No nos esperábamos estos resultados”, asegura Vasquez.
Durante los últimos años, la resistencia a los antibióticos se ha convertido en una amenaza para la salud global. Ahora los científicos de Lund creen que la solución podría venir de las abejas.