Disforia de género o identidad de género (también llamado transexualidad) es un deseo fuerte y persistente identificación con el sexo opuesto en lugar de hacerlo con el sexo biológico o anatómico dado. El diagnóstico y Manual estadístico de trastornos mentales – IV texto revisión (DSM-IV-TR) dice que este deseo de pertenecer al sexo opuesto "va más allá de un deseo de una aparente ventaja cultural". Sin embargo la disforia de género no es una enfermedad mental. Normalmente, los niños entre las edades de tres y cuatro años desarrollan la identidad de género. Esta condición puede manifestar generalmente a una edad temprana. A los chicos con disforia de género detestan su pene o testículos y desean que desaparecerían sus genitales. No les gusta machos juguetes y juegos bruscos. Algunas niñas pueden negarse a orinar en posición sentada y sentir que crecen los órganos genitales masculinos. Pueden estar seguros de que no podría crecer senos o menstruación.