Los miembros de la comunidad LGTB (lésbico-gay-transexual-bisexual) de Brasil admiten que, en materia de derechos humanos, los suyos estuvieron protegidos por los gobiernos de Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff. Opinan que aún queda camino por andar, dado que tan sólo en 2012 hubo más de diez mil denuncias de violaciones a esas garantías, pero advierten que candidaturas como la de Marina Silva y otras del conservadurismo amenazan con abrir las compuertas, incluso en la legislación, para una vuelta de la discriminación y el machismo. teleSUR