T.J. Lane, de 19 años, logró escapar de la cárcel de Lima, en Ohio, donde cumplía condena. Cinco horas después fue capturado en un gran despliegue policial, junto a otros dos reos con los que se había fugado.
Tras conocerse su fuga, las escuelas de la zona decidieron cerrar sus puertas por razones de seguridad.
“No puedo decirles qué estaba haciendo, pero sí que fue capturado a unos cien metros de la valla de nuestra institución”, declaraba el alcaide Kevin Jones.
El pasado año Lane fue condenado a cadena perpetua tras ser declarado culpable del tiroteo en el que tres estudiantes perdieron la vida y otros tres resultaron heridos.