La conjunción de esfuerzos anticontrabando entre autoridades civiles, fuerza pública y consumidores está logrando resultados insospechados en Venezuela, particularmente en lo que se refiere al trasiego ilegal de alimentos. Tan sólo en Caracas, según la autoridad, 200 inspectores hacen uso de modernos aparatos de comunicación para el seguimiento de rutas por donde empleados del transporte sin escrúpulos solían desviar los productos originalmente destinados al consumidor, no a los contrabandistas. teleSUR