(Vídeo) José Vicente Hoy Francisco Arias Cárdenas 07.09.2014 (1/3)

2014-09-08 35

*Se suele decir que el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra, pero en política pareciera que lo hace a cada paso. Y en el caso específico de la política venezolana, es patético lo que ocurre con la oposición, o mejor, con sus dirigentes. Ya que estos no terminan de cometer un error cuando de inmediato se empeñan, por la inexplicable atracción que sobre ellos ejerce el aventurerismo, en incurrir de nuevo en otro o en el mismo.



*Lo que afirmo no es mero capricho. Ni busco con ello descalificar de manera global a un liderazgo que cuenta con personas capaces, serias y con experiencia suficiente para manejar la política acertadamente. Pero el seguimiento de su histórico durante el lapso correspondiente al gobierno bolivariano que arranca en 1999, cuando Chávez derrotó electoralmente al puntofijismo, hasta la fecha, lo confirma plenamente. El saldo es una increible cadena de errores, desaguizados y torpezas de difícil explicación. A no ser que se recurra al dato de una estupidez crónica y consuetudinaria.



*Sino, ¿qué explicación racional pueden tener acciones como oponerse a la constitución del 99, complementada con el golpe del 11 de abril de 2002, el paro petrolero, el terrorismo y, más adelante, la abstención en las elecciones parlamentarias del 2005 que condenó a la oposición a estar ausente de la asamblea nacional? ¿Cómo explicar su política dependiente de Washington, totalmente desnacionalizada y luego, en la etapa de transición del gobierno de Maduro, no entender lo que sucedía? El desconocimiento del resultado electoral favorable a maduro y la declaratoria de guerra del candidato derrotado, el desprecio al llamado a diálogo del nuevo mandatario y, posteriormente, el intento golpista de la guarimba que provocó muertos, heridos y destrucción física en el país constituyen otra insensatez.



*Pero lo más grave de todo cuanto ha provocado ese comportamiento antidemocrático de la oposición, insolitamente errático, es que en ningún momento ésta ha dado explicación a los venezolanos, ni a su gente ni a sus adversarios. Cero autocrítica y cero reflexión en torno a las equivocaciones. En tal actitud está la explicación a los reiterados errores. Su incapacidad para reconocerlos, su arrogancia para aceptar las equivocaciones. Lo cual explica en parte la repetición de los mismos y la fatal tendencia a reincidir.



*Por ese sendero oscuro, pese a todos los fracasos, a las derrotas, sigue avanzando ese liderazgo opositor, sin importarle para nada la reacción adversa del país y de su propia gente. Semejante actitud apuntala los presagios y también los informes de inteligencia, en el sentido de que un sector de la oposición se dispone a repetir próximamente la guarimba, levantando ahora la bandera de oponerse a medidas claves en la lucha contra el contrabando, como el cierre de la frontera con Colombia y a la aplicación del sistema biométrico, la captahuella. El calentamiento de la calle ha comenzado, las acciones