Siete horas de combate en una misión de paz sin bajas ni heridos. Los 72 cascos azules filipinos que fueron rodeados en los Altos del Golán por rebeldes radicales sirios se encuentran a salvo tras haber logrado escapar del cerco. Los islamistas, entre los que hay miembros del Frente Al-Nusra, la filial de Al Qaeda en Siria, habían atacado dos posiciones de las tropas de la ONU. Israel y Siria han participado en la evacuación que ha detallado el jefe militar filipino.
“Actualmente, las fuerzas de paz filipinas de las posiciones 68 y 69 han sido reubicadas con éxito en el campamento Ziouani. Las fuerzas armadas de Filipinas y la ONU no comprometerán la seguridad de nuestras tropas mientras estén desempeñando sus tareas.”
Tanto los filipinos como los 44 cascos azules procedentes de Fiji secuestrados el jueves forman parte de la UNDOF, la misión de la ONU encargada de vigilar desde 1974 los Altos del Golán, una región disputada entre Siria e Israel. Los extremistas han asegurado que los militares capturados se encuentran en buen estado.