Zuma Katjiuonga, de 29 años, vive entre dos mundos. En Windhoek, la capital de Namibia, trabaja como técnico de iluminación en un canal de televisión. Allá lleva una vida moderna y tiene una relación estable desde hace dos años. Pero Zuma pertenece a la tribu nómada de los himba, a cuya tradición se siente muy unido.