Son las instrucciones que ha dado a su equipo economico para hacer frente a las nuevas sanciones europeas y estadounidenses impuestas la semana pasada a Moscú por su papel en la crisis de Ucrania.
El presidente ruso Vladímir Putin ha respondido a la Unión Europea que el uso de “instrumentos políticos de presión sobre la economía es inaceptable”.
El primer ministro ruso, Dimitri Medvedev aseguró ayer que está debatiendo la respuesta a las sanciones occidentales: entre ellas restringir o incluso prohibir el sobrevuelo de Siberia a las líneas aéreas. Esta medida puede tener un fuerte impacto en las compañías aéreas occidentales que actualmente utilizan el pasillo transiberiano para llegar a Asia; es la ruta más corta y más barata.
Como consecuencia de las sanciones de la Unión Europea el domingo pasado suspendió actividades la aerolínea estatal rusa Dobrolet, la filial de vuelos baratos de Aeroflot. Desde la anexión ilegal de Crimea a la Federación Rusa ha operado vuelos entre Moscú y Simferepol.