Un inmueble seco, iluminado, en óptimas condiciones climáticas, y una mística casi religiosa arropan el ánimo de los ecuatorianos encargados de la preservación del acervo audiovisual -magnético y en celuloide- de la nación. La labor de mantener viva y en buenas condiciones de salud esta riqueza documental digitalizada, que será el legado del Estado de la Revolución Ciudadana para las generaciones futuras, cuenta con suficientes partidas del erario que garantizan su continuación. teleSUR