Este sábado se cumplen cien años del magnicidio del archiduque Francisco Fernando, perpetrado por Gavrilo Princip, que provocó el estallido de un conflicto que movilizó a 70 millones de soldados y dejó más de 20 millones de muertos.
Sin embargo, en las calles de Bosnia mucha gente prefiere olvidar.
“Es fantástico. Sin embargo, tengo que decir que no me gustan las guerras ni conmemoraciones de ningún tipo. Lo que a mi me gustaría celebrar es el centenario de 100 años de paz”, asegura Sabahudin Seleskovic.
Para Mehmed Alicehajic, pensionista de Sarajevo, lo importante es la atmósfera festiva que atrae a los turistas. Más allá de eso, dice, los festejos no le interesan porque no se sienten orgullosos de las guerras pasadas.”
Acuden a la conmemoración diferentes jefes de Estado como los de Austria, Croacia, Macedonia y Montenegro.
Destaca, sin embargo, la ausencia de representantes serbios, que conmemoran, hoy, por su parte el magnicidio perpetrado por el joven
serbobosnio Gavrilo Princip, al que homenajean en una ceremonia
paralela en la ciudad serbobosnia de Visegrado.
Ayer, inauguraron en el este de Sarajevo una estatua dedicada al que consideran el héroe de la emancipación de los pueblos eslavos en los Balcanes.
