El terror es tan grande en Irak que la población se une en una sola voz y corre a enlistarse al Ejército. Sus soldados necesitan ayuda y la gente quiere ayudarlos. Los terroristas están bien armados y cuentan con financiamiento millonario exterior.
Los terroristas habían tomado ciudades y una refinería que ya lograron recuperar las Fuerzas Armadas. El Gobierno de Irak tiene varios problemas, EE.UU. esta vez por extraño que parezca no quiso intervenir militarmente para ayudar a los iraquíes, además en el Ejército de Irak hay mandos traidores que apoyan todavía la ideología del fallecido dictador iraquí, Saddam Husein.
Por si fuera poco, los terroristas del autollamado grupo terrorista Estado Islámico de Irak y del Levante (EIIL) son lo más sádico que hemos visto en los últimos días, cortan cabezas, asesinan a niños, hacen masacres colectivas y además amagan con tomar la capital iraquí, Bagdad. Argumentos suficientes para tener otra vez a Irak en “Detrás de la Razón”.