Hombres de la milicia yihadista suní, armados con ametralladoras y morteros, han lanzado un ataque y – según un responsable de las instalaciones – han tomado tres cuartas partes del complejo, situado a 10 kilómetros de Biyi y fundamental para la economía del país,
Los enfrentamientos se mantienen pero fuentes policiales aseguraron que de no recibir refuerzos podría pasar totalmente a manos de los insurgentes, que hace algo más de una semana ya tomaron Mosul, segúnda ciudad de Irak y sede de numerosos bancos que fueron saqueados.
Contenidos en el norte por las fuerzas Persmergas kurdas, el EIIL trata de acercarse a Bagdad.
Con el objetivo de lanzar una contraofensiva y reposicionar sus tropas, el presidente Nuri al Maliki decidió destituir ayer a cuatro altos mandos militares por la caída de Mosul.
Los combates se centran a 60 kilómetros de la capital, especialmente en Baquba, ciudad que los yihadistas quieren controlar para dar el salto a Bagdad. Con el fin de evitarlo, cientos de voluntarios siguen siendo reclutados para unirse al ejército regular y ser enviados al frente.