Hace cinco años, la empresa checa Step Trutnov, especializada en la fabricación de recipientes a presión, decidió diversificarse.
Presentó un dossier y obtuvo una subvención, vía el Fondo Europeo de Desarrollo Regional, de los fondos de la Unión Europea (UE). En total, cerca de 900.000 euros, que le han permitido, principalmente, realizar y comercializar una caldera de biomasa, un producto único en el mundo.
“Somos los únicos capaces de quemar las balas de paja enteras, sin cortarlas… Esto permite ahorrar 157 kilovatios de electricidad por hora. Es nuestra ‘ventaja competitiva’”, explica Klára Pavlícková, Directora de Negocios de Step Trutnov.
Esta pyme checa ha relanzado su actividad en el sector de las ecoenergías. La subvención que obtuvo le ha permitido financiar su sector Investigación y Desarrollo y desarrollar la formación de su personal en estas nuevas actividades.
Esta diversificación ha abierto ampliamente la vía a nuevos mercados, principalmente en el extranjero. Y, muy importante, ha preservado el empleo de esta empresa, ubicada en una región muy golpeada por la crisis.
“En 2009, éramos 46 empleados. Hoy, somos 51. La evolución puede parecer poco significativa, pero somos una de las pocas empresas de esta región que ha sobrevivido a la crisis de 2009”, cuenta Pavlícková.
¿En qué criterios se basan para atribuir estos fondos europeos a las pymes? ¿Qué hay que hacer para poder beneficiarse de ellos?
Las subvenciones de las que se ha beneficiado esta empresa checa provienen de las inversiones de la llamada Política Europea de Cohesión.
Entre 2007 y 2013, se invirtieron unos 70.000 millones de euros. El resultado: se apoyó la puesta en marcha de 70.000 nuevas empresas. Se crearon 250.000 empleos en las pymes.
Concretamente, esta política de cohesión se traduce en subvenciones, préstamos o garantías bancarias, que se otorgan a los empresarios, según los siguientes criterios:
“Debe tener un pasado como empresario, lanzarse a un terreno que la Unión Europea apoya, tener un buen plan de negocio y definir claramente sus objetivos”, dice Jan Novotný, vicepresidente de la Cámara de Comercio Checa.
Si usted es empresario y quiere acceder a los fondos europeos, sepa que dispone de puntos de información en su país o región, por ejemplo vía las cámaras de Comercio e Industria.
“Damos información y consejo a nuestros miembros, pero también al resto de empresarios, sobre las oportunidades de los fondos estructurales europeos. Además, acompañamos a los empresarios para que no se sientan perdidos durante el proceso”, explica Novotný.
“Para mí, la clave del éxito es tener la tecnología, el producto, los fondos para innovar e invertir. Y tener las competencias para desarrollar nuestra propia tecnología”, afirma Pavlícková.
