El dirigente del Movimiento Mutthahida Quami ha sido arrestado por presunto blanqueo de dinero en su domicilio en la capital británica, en la que Hussain se encuentra exiliado desde los años 90, tras ser víctima de una tentativa de asesinato.
Pese a encontrarse fuera del país y ser sospechoso de estar detrás de la muerte de dos destacados políticos pakistaníes, Hussain goza aún de un gran peso dentro de su partido. Por ello su detención ha desatado numerosas manifestaciones de apoyo en Karachi, capital económica de Pakistán, en la que el Movimiento Mutthahida Quami cuenta con un gran respaldo.
La dirección del partido ha llamado a sus seguidores a mantener la calma pero ante el riesgo de posibles altercados, la mayoría de negocios de la ciudad han decidido cerrar sus puertas.