El papa Francisco dirigió una carta en tono coloquial y pletórica de cordialidad a la presidenta Cristina Fernández, de Argentina, y luego un portavoz vaticano puso en tela de duda la autenticidad de la misiva. Juan Pablo Cafiero, embajador de Buenos Aires ante la Santa Sede, conversó personalmente con el pontífice y dice que éste le manifestó su malestar por que haya "medios que quieren sembrar la discordia y sacar agua de la tierra árida". Y otro funcionario vaticano, Federico Lombardi, también sostuvo que la carta es auténtica y que está firmada por la Secretaría de Estado "en nombre" del Papa. La carta está escrita en un tono coloquial, llama a la concordia y animando a la sociedad a que "encuentre caminos de convivencia pacífica, de diálogo constructivo y mutua colaboración". teleSUR