Ucrania: Desafíos, cambios y esperanza en el futuro ante las elecciones

2014-05-23 142

Los ucranianos saben que se juegan mucho en estas elecciones ya que el próximo presidente del país tendrá que manejar una crisis económica, una amenaza militar y un enorme agujero presupuestario. Esto quiere decir austeridad, subida de impuestos para los más ricos y recortes en las ayudas sociales. Y a cambio exigirán mano dura con la corrupción. Un cáncer que sitúa a Ucrania en el puesto 140 de 189 países en la clasificación del Banco Mundial.

Natalya Sokolenko ha participado en la elaboración de una lista de medidas para resucitar las cuentas públicas: “Lo principal es la reforma judicial, la lucha contra la corrupción, la descentralización y la reforma fiscal, esos son los quebraderos de cabeza, digamos. Estos son los problemas que hicieron salir a la gente a la calle, tanto en Maidán como en el este de Ucrania. La gente está harta de la corrupción en los tribunales, con inseguridad en las calles que la policía no puede atajar”.

¿Y cómo pagar buenos salarios, por ejemplo a los profesores, si las arcas están vacías? Desde 1993 el crecimiento, a precios constantes, solo ha llegado al 0’05%, el peor en la Europa del este.

Olha Zorenko es profesora de geografía a 50 kilómetros Kiev. “El salario de una profesora joven es de unas 1000 grivnas, el equivalente a 60 euros”, explica. “Para alguien que esté cerca de la jubilación, con todos los pluses, llega hasta las 4000. Estos salarios son una vergüenza para cualquier país y por supuesto algo tiene que cambiar”.

“Por supuesto todos hablamos en la escuela sobre lo que va a pasar. Yo diría que los profesores aquí están preparados para rebajar sus aspiraciones materiales, por decirlo así”, remarca. “Estamos listos para hacer algunos sacrificios, pero por un tiempo limitado. Vemos el futuro por delante y entendemos que podría ser mejor. Si perdemos esta oportunidad hoy, no tendremos otra”.

La recuperación será larga y a corto plazo hay muchas amenazas. Pero para sus alumnos las preocupaciones de los adultos están lejos todavía. Es el tiempo de divertirse, hay que aprovechar para jugar.