Las autoridades del archipiélago ecuatoriano de Galápagos siguen sus intentos para sacar de la reserva marina a un barco que encalló el pasado 9 de mayo cerca de la Isla San Cristóbal.
El área protegida está en situación de emergencia por el accidente del buque del que se han bombeado 86.000 litros de diésel para evitar cualquier contaminación. Hasta ahora solo ha habido impactos menores en el ecosistema debido al casco del buque encallado en el fondo marino.