El eje franco-alemán exige a Rusia que allane el camino para la celebración de las elecciones presidenciales en Ucrania. En una rueda de prensa conjunta, la canciller alemana y el presidente francés han mostrado su compromiso con el proceso electoral emprendido por Kiev y su total rechazo al referéndum independentista que se celebrará mañana en el este del país.
“Consideramos ilegítimo el referéndum previsto para mañana”, decía Angel Merkel, “y nos centramos en las elecciones nacionales del 25 de mayo. Hemos decidido, ya que las dos próximas semanas son decisivas de cara a la celebración de las elecciones, cooperar estrechamente y dejar claro que el presidente ruso tiene que enviar más señales distensión para que que estas elecciones sean posible”.
Merkel y Hollande han añadido que si Rusia no coopera en este objetivo tendrá consecuencias. El eje franco-alemán no esconde su irritación tras ver a Putin celebrando el día de la Victoria en la ciudad crimea de Sebastopol, que está situada en el territorio ucraniano que Rusia se anexionó el pasado veintiuno de marzo.