Los avances del ejército sirio sobre territorios ocupados por mercenarios y la convocatoria a elecciones donde el candidato favorito es -por mucho- el presidente en funciones, Bashar al-Assad, son la explicación que los analistas dan al relanzamiento de la campaña contra Damasco desde Estados Unidos, Europa occidental y los países petroleros de Arabia, y a la intensificación de los atentados terroristas cometidos por mercenarios en el territorio de aquel país. Los dos últimos, cometidos apenas hace unas horas en la ciudad mártir de Homs, arrojaron 45 muertos, y -de acuerdo con los mismos expertos- precisamente tienen el propósito de truncar el proceso electoral. teleSUR