El buque australiano Ocean Shield ha captado dos emsiones que podrían provenir de las cajas negras del avión de Malasia Airlines desparecido hace casi un mes.
Es la “pista más prometedora” hasta ahora, según el jefe del
operativo coordinado por Australia que mostró las zonas donde han sido detectadas las emisiones, a unos 550 kilómetros de donde, el viernes, un barco chino registró señales parecidas.
“El buque Ocean Shield recibió dos señales, una de las cuales duró más de dos horas. Sin embargo, aclara Augus Houston, no podemos confirmar que se trate del avión. En primer lugar, todavía falta localizar la posición de las señales. Una vez que eso ocurra, el Ocean Shield sumergirá el submarino autónomo, Bluefin 21, para tratar de localizar los restos en el fondo del mar.
La señal se escuchó a una profundidad de 4.500 metros, límite de la capacidad de profundidad del Bluefin 21. La operación de búsqueda se ha convertido en una carrera contrarreloj ya que las baterías las cajas negras están a punto de agotarse.