Aquí en Pattaya, una estación balnearia de Tailandia, se reservaron los billetes de los dos pasajeros que viajaban con pasaportes falsos en el Boeing de Malaysia Airlines.
Kuala Lumpur es un lugar de tránsito para muchos emigrantes clandestinos de Asia que tratan de viajar a Europa con un pasaporte robado.
Ahora se investigan los del austríaco Christian Kozel y del italiano Luigi Maraldi robados en 2012 y 2013, según ha confirmado Interpol.
Christophe Naudin es experto en seguridad aérea:
“Aquí hay algo inquietante. Cuando se roba un pasaporte, se suele vender a emigrantes y en general, se hace uso del documento rápidamente después del robo. Éste no ha sido el caso, pues los pasaportes fueron conservados uno de ellos durante dos años y el otro durante un año.”
Los billetes de Kozel y Maraldi llevaban números consecutivos. Ambos hacían escala en Pekín hacia Europa.
Policía y agencias de inteligencia investigan el tráfico de pasaportes robados y un posible vínculo terrorista con el avión desaparecido.