El celo puesto por el el gobierno argentino en el control soberano de sus recursos energéticos y en hacer que sus beneficies alcancen hasta las comunidades más apartadas de la nación, logró que, de un año a la fecha, el suministro de energía eléctrica se duplicara en el vasto territorio de esa nación, de tal manera que ahora los megawattios llegan hasta la Patagonia, hasta Santa Cruz, y además a costos razonables que no se dejan a la arbitrariedad del mercado. Por otro lado, en dos millones de hogares argentinos ya se consume gas natural, también con tarifas módicas. teleSUR