La tensa situación en el aeropuerto de Simferópol ha perturbado el tráfico aéreo. Algunos pasajeros se han visto afectados por los retrasos y cancelaciones de vuelos, aunque por lo demás no parecen demasiado preocupados por la situación.
“No tengo miedo de nada. ¿Por qué deberíamos tener miedo de gente armada? Hemos tenido mucho miedo en Ucrania. Pero ya no”, señala un pasajero cuyo vuelo ha sido cancelado.
“No tengo miedo. Porque espero que no habrá ninguna acción militar. Al menos eso espero”, dice una pasajera cuyo vuelo ha sido cancelado.
“En general, en tiempos de paz, en un país normal es un poco extremo que personas armadas se paseen cerca de un edificio civil. Pero quizá está justificado, en este caso, por lo que está sucediendo en Ucrania. Así que creo que está bien”, afirma otro pasajero.
La situación en Crimea hace que el Consejo nacional de Seguridad ucraniano se plantee la posibilidad de declarar el estado de excepción en el país.
“Lo que hay en juego es mucho mayor de lo que está pasando aquí en Crimea. El separatismo es una carta fuerte que podría ser utilizada para hacer presión sobre el nuevo Gobierno en Kiev, que no está siendo reconocido por Moscú”, explica el corresponsal de euronews en Kiev,Sergio Cantone.