Una retirada que no implica el final de la batalla. Los opositores ucranianos que ocupaban el ayuntamiento de Kiev han desalojado el inmueble y la escena se ha repetido en otros cuatro edificios oficiales en diferentes regiones. También han comenzado a retirar las barricadas de una de las calles próximas a la plaza de la Independencia.
Es la condición para que los 234 presos capturados desde el mes de diciembre durante las protestas sean liberados bajo la ley de amnistía aprobada el pasado 29 de enero. Mañana es la fecha límite para que la medida sea implementada pero antes el fiscal general debe verificar que los requisitos han sido cumplidos, algo que la oposición afirma que ya ha ocurrido.
A pesar del indulto muchos de los arrestados seguirán con causas pendientes en caso de existir acciones criminales. La justicia ha prometido que los procesos estarán cerrados en un mes.
Pero la rendición de los opositores no está sobre la mesa. Este domingo han vuelto a manifestarse para pedir cambios constitucionales que supongan mayores poderes para el Parlamento y, como sueño por ahora inalcanzable, la renuncia del presidente Víktor Yanukóvich.