El Irán de Hasán Rohaní celebra el 35 aniversario de la revolución tendiendo la mano a comunidad internacional.
Millones de iraníes celebran los llamados Diez Días del Amanecer, que recuerdan el regreso del ayatolá Jomeini a Irán, el derrocamiento del último sha de Persia y la instauración de la República Islámica.
“La política del Gobierno en el terreno de los Asuntos Exteriores es moderada, lo que significa, ninguna concesión, ningún compromiso, ninguna oposición y ninguna reacción. Irán progresa para dotarse de una tecnología nuclear pacífica”, ha dicho el presidente Hasán Rohaní, en un discurso en el centro de Teherán.
La víspera de este 35 aniversario, Teherán probó con éxito dos misiles balísticos de nueva generación de largo alcance. Una prueba de fuerza que se desarrolló en paralelo a las negociaciones sobre su polémico programa nuclear.
De hecho, este domingo el Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA) y el régimen iraní alcanzaron un nuevo acuerdo de cooperación. Un pacto posible después de que Teherán cumpliera los compromisos alcanzados en noviembre y que han permitido una congelación parcial y temporal de las sanciones internacionales.
