El director de cine estadounidense ha negado por última vez las acusaciones de abusos sexuales proferidas por su hija Dylan Farrow.
Con el objetivo de zanjar una polémica que lleva días planeando sobre la cabeza del artista, Woody Allen ha publicado un artículo en el New York Times, el mismo diario donde hace poco más de una semana su hija le acusó, para asegurar públicamente que jamás la tocó.
En su larga misiva, el director dice que Dylan lleva años siendo manipulada por su madre, su exesposa, Mia Farrow. Hace veinte años la actriz acusó por primera vez a Allen de abusar de su hija. Una denuncia que el cineasta siempre ha justificado por el enfado de esta al abandonarla.
A pesar de que la sombra de la sospecha siempre ha estado presente, el cineasta ha seguido con su prolífica carrera. El mes pasada fue homenajeado en la gala de los Globos de Oro por toda su trayectoria y su última película ha recibido varias nominaciones para los Oscars.
