El desalojo de Ein Hijleh tuvo lugar durante la madrugada. Unos 300 activistas palestinos habían empezado a repoblarla a finales de enero para protestar contra la negativa de Israel de desmantelar las colonias judías de la zona, incluso después de un hipotético acuerdo de paz con Palestina.
El valle del río Jordán, en el este de Cisjordania, forma parte del territorio ocupado por Israel en 1967. Aunque en él casi no residen judíos, Israel controla la seguridad y la planificación administrativa de esta zona clave por sus reservas de agua, en una región semidesértica.
La Unión Europea y Naciones Unidas, entre otros, han mostrado su preocupación por la creciente demolición de aldeas en la zona. Los palestinos denuncian que detrás de ello está la intención no declarada de una futura anexión por parte de Israel.
