Miles de personas volvieron a las calles de Río de Janeiro para protestar por el aumento del precio de las tarifas de autobús, en una concentración que fue violentamente reprimida por la policía. Bajo las consignas "FIFA paga mi transporte", "El Mundial no se va a hacer", algunos de los manifestantes invitaron a los presentes a pasar los controles sin pagar. teleSUR