Túnez festeja su primera Constitución democrática, considerada la más progresista del mundo árabe.
Diversos jefes de Estado y altos representantes de varios países, entre ellos el príncipe Felipe de Borbón, han asistido a la ceremonia de adopción de la nueva Carta Magna en el Parlamento.
“Es un texto importante. Porque es el fruto de un compromiso institucional que ustedes han sido capaces de alcanzar juntos. Y porque puede servir de ejemplo y de referencia a muchos otros países”, ha dicho el presidente francés, François Hollande.
De los 216 diputados presentantes, 200 dijeron Sí al texto el pasado día 27.
Entre los principales logros de la nueva Constitución tunecina: el principio de igualdad entre sexos o la libertad de credo y de expresión. Aunque algunas organizaciones internacionales han criticado que siga contemplando la posibilidad de que se aplique la pena de muerte.
