El partido gobernante Fidesz, que cuenta con una mayoría de dos tercios en el Parlamento, no ha tenido obstáculos para refrendar el acuerdo firmado el 14 de enero entre Víktor Orbán y Vladimir Putin.
Rusia otorgará un préstamo de 10.000 millones de euros, cuyas contrapartidas no se conocen, para que Hungría aumente su potencia nuclear, una operación que aprueba el 51% de los húngaros según los sondeos… aunque desaprueben al socio: el 54% no quiere a Moscú detrás.
Los diputados ecologistas han bloqueado durante unos minutos la votación en señal de protesta y se han opuesto en la cámara. Mientras los ultranacionalistas de extrema derecha de Jobbik han votado a favor.
Paks, a cien kilómetros al sur de Budapest, tiene cuatro reactores – a los que se añadirán dos más – que producen el 40% de la energía consumida en el país. La planta fue contruida en los años setenta.