Una reunión de trabajo en el sentido más profundo, serio, que puede transmitir esa frase, tiene lugar en Maracaibo -este jueves- entre autoridades civiles y militares de dos países vecinos. La explicación es sencilla y la da la Cancillería de Caracas: el contrabando de alimentos en la zona fronteriza Venezuela-Colombia perjudica la economía de los dos países. En el primero encarece esos productos y da origen a una escasez artificial; en el segundo, destruye fuentes de empleo. teleSUR