La organización ecologista ha acusado a varios buques de la flota japonesa de chocar voluntariamente contra uno de sus barcos.
Una colisión a la que han calificado como uno de los ataques más graves jamás sufridos.
El incidente ocurrió en el océano Antártico cuando dos buques del Sea Shepherd intentaban impedir la caza de ballenas.
“Poco después de medianoche, los tres arponeros japoneses de la flota ballenera empezaron a rodear al Bob Barker y al Steve Irwin. Estaban adelantado a nuestros buques a una distancia muy corta, a veces a solo tres o cinco metros de nuestra proa”, decía la tripulante Kelly Higgins
La organización ecologista, conocida por sus acciones directas contra los buques balleneros, llevaba más de una semana siguiendo a tres barcos japoneses para impedirles la caza de cetaceos.
Según Sea Shepherd los arponeros intentaron estropear las hélices de dos de sus buques con cables de acero y lanzándoles proyectiles.
No es la primera vez que la organización ecologista sufre los ataques de balleneros japoneses. En enero de 2010, Sea Shepherd perdió un trimarán al ser embestido por un buque nipón.
La pesca comercial de ballenas está prohibida desde 1986 pero Japón dice que lo hace por fines científicos.