El músico italiano y uno de los mejores directores de orquesta de todos los tiempos ha fallecido en su casa de Bolonia después de una larga enfermedad.
Abbado renovó la dirección musical al frente de las más elitistas orquestas del mundo. Fue director musical de la Scala de Milán, de la Staatsoper de Viena y director artístico de la Filarmónica de Berlín, donde sustituyó a Herbert Von Karajan.
Nacido en Milán e hijo de padre violinista y madre pianista, este admirador de Beethoven, Debussy y Brahms se dio a conocer a nivel internacional en 1965 con su dirección de la Segunda Sinfonía de Mahler en el festival de Salzburgo.