Miguel Ángel Moratinos, exministro de Exteriores de España con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, es un gran conocedor de las negociaciones entre palestinos e israelíes. Durante 7 años —de 1996 a 2003— fue el enviado especial de la Unión Europea para Oriente Medio. Ha vivido en primera persona los altibajos del proceso de paz y negociado, cara a cara, con sus principales protagonistas.
Luis Carballo, euronews:
Señor Moratinos, gracias por estar con nosotros en Euronews.
Hacer balance de un personaje tan controvertido como Ariel Sharon es siempre difícil pero le voy a pedir que me diga ¿Hasta qué punto las decisiones de Sharon —tanto en el campo de batalla, como en la arena política— han moldeado el Israel de hoy en día?
Miguel Ángel Moratinos:
Es un personaje controvertido, como usted mismo ha señalado, que la historia juzgará, con sus épocas de enormes sombras, Sabra y Shatila. Nadie podrá olvidar la masacre que ocurrió en los campos palestinos en septiembre de 1982. Luego, como no siempre estuvo en favor de las negociaciones que se iniciaron después de los Acuerdos de Oslo, siempre buscando la ampliación de los asentamientos, provocando son su llegada a la Explanada de las Mezquitas, provocando la Segunda Intifada. Y luego cuando asumió las responsabilidades de Gobierno y ser primer ministro, fue evolucionando positivamente hacia acuerdos de paz.
euronews:
¿Su desaparición marca, quizás, el final de una era? La de esa generación de líderes israelíes forjados en la guerra.
Miguel Ángel Moratinos:
Espero que sí,. Hasta ese momento, prácticamente, todos los primeros ministros tenían que haber pasado por las fuerzas armadas de Israel. Había ese sentimiento de seguridad que predominaba y sigue predominando en la política de Israel. Y es verdad que con la desaparición de Sharon creo que se inicia una nueva etapa.
euronews:
¿Cómo era Sharon en la mesa de negociaciones?
Miguel Ángel Moratinos:
Tenia una doble personalidad. Cuando unos se encontraba con el siempre era amable, me acuerdo que me recibió de manera muy cordial en su granja cerca de Gaza. Todo en un ambiente muy relajado y cortes. Y luego era un hombre enormemente enérgico, de decisiones duras, transcendentales en algunos casos.
euronews: Se considera a Sharon como el fundadr del movimiento colono en los territorios palestinos ocupados. Pero, como primer ministro, en un impresionante giro, demostró que los asentamientos no eran irreversibles con el plan de desconexión de Gaza. ¿Fue esta su mayor contradicción o un movimiento estratégico?
Miguel Ángel Moratinos:
“Le ha ocurrido a muchas personalidades y políticos israelíes, que cuando asumen la responsabilidad, fue el caso de Isaac Rabin e incluso Golda Meir o Ben Gurion, que ven la necesidad de buscar soluciones.
Sharon también buscó soluciones. Pero quizás no de la mejor manera posible porque rechazó estrechar la mano del presidente Arafat.
Su rechazo a negociar, a llegar a compromisos y acuerdos de cualquier tipo tuvo un impacto en sus decisiones. Incluso en las decisiones positivas.
Como la retirada de Gaza, por ejemplo, que fue una medida unilateral. No hubo acuerdo con la ANP (Autoridad Nacional Palestina) y siempre hubo esa separación, por eso siempre quuedará la duda de si Sharon planeaba firmar un acuerdo definitivo o quería un Estado palestino junto a Israel, viviendo en paz.”