Según el hospital Tel Hashomer donde lleva ocho años ingresado, el estado de salud del ex primer ministro israelí ha empeorado de forma dramática en las últimas horas y su condición es desesperada.
La radio militar ha anunciado que le quedan pocas horas de vida.
Desde el 1 de enero los médicos describen su estado como crítico debido a una insuficiencia renal que afecta a otros órganos vitales.
Sharón, de 85 años, sufrió una hemorragia cerebral en 2006 y desde entonces está en coma.