Júbilo en la ciudad cisjordana de Ramallah ante la tercera excarcelación de presos palestinos desde agosto.
Los 26 liberados cumplían condena por delitos de sangre contra civiles israelíes, soldados o palestinos sospechosos de colaborar con Israel.
El presidente palestino Mahmud Abbas les dio la bienvenida personalmente.
“No firmaremos un acuerdo de paz definitivo con Israel antes de que todos los presos sean liberados”.
En total se dejará en libertad a 104 presos, en un gesto de buena voluntad de Israel ante las nuevas negociaciones de paz impulsadas por Estados Unidos que comenzaron en julio.
“Estoy tan feliz”, comentaesta mujer. “No he visto a mi marido en 22 años. Este es el mejor día de mi vida, es una gran alegría”.
Los delitos de los liberados que cumplían entre 19 y 28 años de condena fueron cometidos antes de los acuerdos de Oslo de 1993.
“No puedo describir cómo me siento, estoy muy bien. Pero sigue siendo duro porque hemos dejado atrás a otros presos, sobre todo a presos enfermos que están pasando toda su vida en prisión.
Héroes para unos y sangrientos terroristas para otros.
Para paliar el descontento generado en parte de la sociedad israelí, el primer ministro Benjamin Netanyahu podría anunciar la construcción de 1400 nuevas viviendas en los territorios ocupados.
El secretario de estado estadounidense John Kerry viaja esta semana a la zona para reunirse con Netanyahu y Abbas, e intentar establecer las líneas maestras de un posible acuerdo.
