Barcelona, 22 dic (EFE), (Imagen: Eduard Barraguer).- El León de Belfast dio anoche una clase magistral de soul, jazz, rhythm and blues y saber hacer musical en el Gran Teatro del Liceo, donde demostró que el título de su último trabajo "Born to sing" ("Nacido para cantar") es una verdad como un templo.
El público barcelonés, que hacía ocho años que no tenía la oportunidad de ver en directo a Van Morrison, disfrutó de un recital plagado de grandes clásicos, en el que el maestro ha alegrado a los presentes con temazos como "Days like this", "Moondance" o "Precious Time".
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