El vídeo grabado por un indocumentado sirio con su teléfono móvil ha dado la vuelta al mundo, poniendo en entredicho a Italia. En él se ve cómo se desinfecta de la sarna a un grupo de hombres desnudos en el centro de acogida de Lampedusa.
La Fiscalía regional investiga un supuesto delito de violencia privada y maltrato contra las personas bajo cuidado y custodia.
La comisaria europea de Interior, Celcilia Malmström, considera inaceptable el contenido de las imágenes de Lampedusa. Su portavoz, Michele Cercone, ha amenazado con sanciones si no se cumplen las reglas europeas.
“Hemos visto que ya hay una investigación en curso. Esperamos ahora que se depuren responsabilidades. Hemos concedido ayudas a Italia para las urgencias de la inmigración y estamos trabajando duro en ello. Así que queremos resultados concretos, incluidas mejoras en los centros de acogida. En caso contrario, nos veremos obligados a utilizar todos los mecanismos de los que disponemos, sin descartar el procedimiento de infracción”, dice Cercone.
El Gobierno italiano ha anunciado que llevará a cabo una profunda investigación. Este escándalo se produce dos meses después de que 366 “sin papeles” murieran en el naufragio de su barcaza cuando se dirigían a Lampedusa.
