¿Qué está ocurriendo en las entrañas del régimen norcoreano? Un régimen que este martes conmemora el segundo aniversario de la muerte de un ataque cardiaco del anterior líder, Kim Jong-il.
Su hijo, Kim Jong-un ha presidido la ceremonia. Si hace dos años se pensaba que, una vez en el poder, el joven líder sólo sería un títere, hoy su figura da miedo. La semana pasada, su tío, Jang Song-thaek, un hombre que detentaba un enorme poder y era considerado el número dos del régimen, fue ejecutado de forma fulminante por supuesta traición.
En Pyongyang, la imagen es la habitual: una coreografía perfectamente pautada de niños y adultos honrando con flores a sus líderes, pero en toda la región la purga intestina en la cúpula norcoreana ha desatado las alarmas. Hasta China, principal sustento y apoyo del régimen, se preocupa por el giro de los acontecimientos. “Esperamos que no haya cambios drásticos”, ha declarado el jefe de la diplomacia china. Aunque donde la inquietud es mayor es en Corea del Sur, donde temen que el régimen norcoreano entre en un periodo de inestabilidad interna, que se traduzca en nuevas provocaciones y actitudes beligerantes.
