La ciudad de Newtown, en el estado estadounidense de Connecticut, ha recordado sin presencia de los medios de comunicación a las 26 víctimas del tiroteo registrado hace un año en una escuela primaria.
En la Casa Blanca, el presidente Barack Obama y su esposa Michelle encendieron 26 velas y honraron la memoria los fallecidos con un minuto de silencio.
“Tenemos que hacer más para evitar que las personas peligrosas tengan fácil acceso a las armas y para tratar a los perturbados. Tenemos que hacer todo lo posible para proteger a nuestros hijos de cualquier daño y hacer que se sientan amados, valorados y atendidos”, dijo Obama, partidario de un mayor control de la venta de armas.
Con motivo del aniversario, activistas contra la violencia de las armas se manifestaron frente al cuartel general de la Asociación Nacional del Rifle, en Virginia. Un año después de la matanza, sigue pendiente una regulación federal sobre las armas de fuego.
