La producción y la venta de marihuana ya son legales en Uruguay. El Senado ha dado su bendición al polémico proyecto tras 12 horas de acalorado debate, con 16 votos a favor y 13 en contra. La ley, impulsada por el presidente y exguerrillero José Mújica, prevé que el comercio de marihuana quede bajo el control de un ente regulador estatal.
“El problema del consumo no se genera a partir de la regulación que establece la ley. La ley establece esa regulación justamente para enfrentar las consecuencias negativas que tiene el consumo de marihuana en nuestra sociedad”, dice el senador Roberto Conde, del bloque gubernamental de izquierdas, Frente Amplio.
Tanto en el Senado como en los alrededores, activistas y consumidores celebraron una decisión que no gusta a dos tercios de la población uruguaya y tampoco a países vecinos como Brasil.
“Hoy es un día histórico, no sólo para Uruguay, sino para todo el mundo. Uruguay es el primer país que regula el mercado de marihuana. Hay una apuesta fuerte ahora y las organizaciones sociales van a seguir trabajando para que esto sea eficaz”, afirma un joven uruguayo.
Uno de los aspectos más criticados es el precio que el Gobierno quiere fijar, de un dólar por gramo de marihuana, para hacerlo competitivo ante el mercado negro. La oposición opina que esto va a convertir Uruguay en el paraíso del narcoturismo.