La farmacéutica alemana de la talidomida, que provocó malformaciones congénitas en cerca de 3.000 personas en España, ha sido condenada a indemnizar a los afectados con 20.000 euros por cada punto porcentual de minusvalía reconocido. Las víctimas, satisfechas con la resolución, resaltan el reconocimiento de la justicia al que consideran el mayor atentado farmacológico de la historia.