Las hay largas, que caen por su propio peso. También la hay anchas, estiradas más allá de los límites de la gravedad. Las hay que parecen estrellas de mar o pulpos con sus ocho brazos en jarra guardando un equilibro imposible y autoritario… Hablamos de barbas, claro está. Todas se han dejado ver en el Campeonato Mundial de Barbas y bigotes que se ha celebrado en la pequeña localidad alemana de Leinfelden-Echterdinge. La competición, bianual, ha superado todas las expectativas:
– “La participación es increíble”, dice uno de los organizadores. “Han venido de una veintena de países . Hay más de 300 participantes, mucho más de lo que se esperaba”.
– “He ganado algunos concursos en Estados Unidos, así que decidí probar suerte aquí”, comentaba uno de los participantes.
La competición, que se celebró por vez primera en 1990, tiene numerosas categorías y estilos. El equipo de Estados Unidos, donde se celebrará el próximo campeonato dentro de dos años, es el que se lleva mejor sabor de boca. Sus integrantes han ganado 9 trofeos, 5 de ellos con la máxima distinción.