Antes del partido, se entregó una placa a Piñera, que después de defender durante muchos años la meta del Andés, llegaba a San Pedro como visitante por primera vez en su vida.
En el partido, se adelantó el Tapia, que aprovechó su primera llegada para marcar. Reaccionó pronto el Andés que empató por medio de Pablín.
Tras el descanso, los nuestros desequilibraron la balanza con dos soberbios goles de los hermanos Alonso, primero de Uve y posteriormente de Pablo, que dieron la victoria a los nuestros y tres puntos de oro que nos colocan en la zona tranquila de la tabla.
