Obama mantuvo una reunión en la Casa Blanca con legisladores de las dos cámaras del Congreso y los titulares de las comisiones legislativas más importantes.
El presidente dijo que el uso de armas químicas que atribuye al gobierno sirio representa una “seria amenaza a nuestra seguridad nacional” y a toda la región, y en consecuencia “al Asad y Siria deben rendir cuentas”.